Lo tengo. Lo que no entiendo es que como está tan poco valorado. En su precio de mercado lo he visto a tres euros. Hay tabernas que por una copa de vino cobran más de lo que cuesta este bonito bólido. No tiene ninguna pretensión como modelo, y por eso, con pocos detalles, tiene pocos errores y en su valoración sale muy bien parado. Lástima que aquella colección proveniente de Japón durase tan poco en Europa. DelPrado intentó meter la pierna en la puerta que las editoriales japonesas dejaron entreabierta, e intentaron publicar una colección de 50 números de vehículos de competición (rally, circuito, F1, un poco de todo) y en su mayoría con moldes de Universal Hobbies. Pero en el nº 28 la cancelaron por quiebra de la editorial allá en el país nipón. Los restos se los trajeron a Europa, y los fueron colocando allá donde pudieron. Saludos.
Muchas gracias por aclararnos el origen de esta colección de Del Prado, no sabía que era una editorial japonesa. De ella tengo este Toyota 7 Turbo, un 2000 GT, un Porsche 904/6 y un Lola T70 (transformado), pero me gustaría conseguir otros modelos más. Ya me pongo a rastrear cuáles existen. Abrazo!
Walter, la historia del Toyota 7 no es bonita porque dos de sus pilotos fallecieron en distintos accidentes durante sus pruebas. Tanto que fue retirado y jamás llegó a correr en CanAm. Más allá de eso, ¡el coche es hermoso! Abrazo!
La Can-Am ha dejado para la historia un buen puñado de coches bellos. Este Toyota, del que desconocía su historia, está muy bien, con un alerón rasante, pero tan presente como si fuera un auto del Pike's Peak. Saludos.
Los coches de CanAm de la primera etapa (1966 a 1974) son muy bellos, hasta diría que bestiales. Pero los de la segunda (1977 a 1987, derivados casi todos de monopostos) te diría que son más bellos aún, al menos en sus formas. Este Toyota, si bien no llegó a correr, muestra esa bestialidad de los primeros tiempos. Abrazo! PD: Justo estuve mirando en Ebay un prototipo de la Pike's Peak...
Lo tengo. Lo que no entiendo es que como está tan poco valorado. En su precio de mercado lo he visto a tres euros. Hay tabernas que por una copa de vino cobran más de lo que cuesta este bonito bólido.
ResponderEliminarNo tiene ninguna pretensión como modelo, y por eso, con pocos detalles, tiene pocos errores y en su valoración sale muy bien parado.
Lástima que aquella colección proveniente de Japón durase tan poco en Europa. DelPrado intentó meter la pierna en la puerta que las editoriales japonesas dejaron entreabierta, e intentaron publicar una colección de 50 números de vehículos de competición (rally, circuito, F1, un poco de todo) y en su mayoría con moldes de Universal Hobbies. Pero en el nº 28 la cancelaron por quiebra de la editorial allá en el país nipón. Los restos se los trajeron a Europa, y los fueron colocando allá donde pudieron.
Saludos.
Muchas gracias por aclararnos el origen de esta colección de Del Prado, no sabía que era una editorial japonesa. De ella tengo este Toyota 7 Turbo, un 2000 GT, un Porsche 904/6 y un Lola T70 (transformado), pero me gustaría conseguir otros modelos más. Ya me pongo a rastrear cuáles existen.
EliminarAbrazo!
Hermoso auto, con una historia no tan hermosa....
ResponderEliminarExacto, historia típica de esos años.
EliminarAbrazo!
Se não for um abuso, eu perguntaria: por que a hiatória deste auto não é bonita?
ResponderEliminarNão sei nada de seus resultadoa, mas que carro lindo!
Além disso, um carro destes fazendo as curvas inclinadas do velho Fuji Speedway , com suas curvas super inclinadas deve ser fantástico.
Walter, la historia del Toyota 7 no es bonita porque dos de sus pilotos fallecieron en distintos accidentes durante sus pruebas. Tanto que fue retirado y jamás llegó a correr en CanAm. Más allá de eso, ¡el coche es hermoso!
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No lo sabia. Que pena.
ResponderEliminarWalter, aquí su historia:
Eliminarhttps://thegaragistes.wordpress.com/2018/10/12/la-belleza-mortal-del-toyota-7/
Abrazo!
La Can-Am ha dejado para la historia un buen puñado de coches bellos. Este Toyota, del que desconocía su historia, está muy bien, con un alerón rasante, pero tan presente como si fuera un auto del Pike's Peak.
ResponderEliminarSaludos.
Los coches de CanAm de la primera etapa (1966 a 1974) son muy bellos, hasta diría que bestiales. Pero los de la segunda (1977 a 1987, derivados casi todos de monopostos) te diría que son más bellos aún, al menos en sus formas. Este Toyota, si bien no llegó a correr, muestra esa bestialidad de los primeros tiempos.
EliminarAbrazo!
PD: Justo estuve mirando en Ebay un prototipo de la Pike's Peak...